Andalucía, Cataluña, Comunidad de Madrid y Comunidad de Valencia representan el 56% de toda la contratación de estas personas

MADRID, 15 (EUROPA PRESS)

La contratación de las personas con discapacidad creció un 2,3% en 2022 y uno de cada cuatro contratos indefinidos firmados por las personas con discapacidad fueron fijos discontinuos. Así consta en un informe elaborado por Fundación Randstad sobre la contratación de las personas con discapacidad durante el pasado año.

En concreto, y según este estudio, el número de contratos a personas con discapacidad fue de 315.000, un 2,3% más que el año anterior y un peso del 1,7% sobre el total de la contratación.

El informe se analiza también la evolución de la contratación en los últimos años. En 2019 alcanzó cifras récord, con más de 354.000 contratos firmados por las personas con discapacidad. Por el contrario, con la pandemia en 2020 la contratación cayó un 30%.

Sin embargo, y aunque la recuperación comenzó a partir del 2021 y registró dos años consecutivos de crecimientos, en el informe se advierte de que aún no se ha logrado alcanzar los niveles previos a la pandemia.

Según este informe, el crecimiento de la contratación se explica "por el aumento de un 178% de la contratación indefinida". "La contratación de las personas con discapacidad no ha sido indiferente a la reforma laboral del 2022. El crecimiento del 2,3% viene explicado por el intenso crecimiento de la contratación indefinida, que ha alcanzado una cifra de 98.515 en 2022, lo que supone un aumento de un 178% en términos interanuales. De esta forma, se ha logrado compensar la caída de un 21% de la contratación temporal, cuya cifra se ha situado en 216.433 en 2022", recoge el informe.

En este sentido, el estudio señala que otra de las consecuencias de la reforma laboral es el cambio en la distribución de la contratación indefinida de las personas con discapacidad. Así, el 25% de todos los contratos indefinidos firmados por las personas con discapacidad fueron fijos discontinuos.

Los contratos indefinidos a tiempo parcial pasan a representar el 31% (30.000) y los indefinidos a tiempo completo reducen también su peso hasta el 44% (43.000). Esto significa que más de la mitad (56%) de la contratación indefinida de las personas con discapacidad se materializó con un contrato a tiempo parcial o fijo discontinuo, según ha revelado el informe elaborado por Fundación Randstad y Randstad Research.

En lo que respecta a la contratación temporal, el informe ha mostrado que la modalidad que más se ha reducido es el contrato por obra o servicio (-82%). Por el contrario, se advierte de que las modalidades que suben son los contratos de formación en alternancia (50%), seguidos de los contratos por jubilación parcial (34%).

Asimismo, en el estudio también se analiza la contratación de las personas con discapacidad por comunidades autónomas, y se observa cómo Andalucía (20%), Cataluña (15%), la Comunidad de Madrid (13%) y la Comunidad Valenciana (9%) concentran la firma del 56% de todos los contratos del 2022.

Al respecto, una de las principales conclusiones a las que llega este informe es que el crecimiento de la contratación de las personas con discapacidad no es homogéneo en todas las comunidades autónomas. En este punto, Baleares y Canarias lideran el crecimiento, con un 33% y un 30% más de contratos firmados respecto a 2021, respectivamente. Y, por el contrario, destaca la fuerte caída de la contratación de las personas con discapacidad en Murcia (-12%) y Extremadura (-9%).

"QUEDA CAMINO POR HACER"

La directora de la Fundación Randstad, María Viver, ha declarado que la participación de las personas con discapacidad en el mercado laboral ha crecido, pero aún queda mucho camino por hacer y, ha añadido que, para no revertir estos avances es fundamental una revisión de las políticas activas de empleo, y apostar por modelos de capacitación que les dote de habilidades y competencias estratégicas, según la demanda del mercado de trabajo.

Por ese motivo, Viver ha manifestado el compromiso de la Fundación Randstad de seguir trabajando y apostando por una formación más especializada como elemento clave de la integración de las personas con discapacidad, que les permita acceder a nuevas oportunidades laborales.